Ciudades
POR CARLOS JIMÉNEZ
Lo apodan El Dedotes, se llama Edison "N". Los tatuajes que se hizo en la mitad del rostro le han servido para intimidar a las personas a las que agrede y asalta. Pero también han permitido a las autoridades identificarlo de manera sencilla en cada ocasión en que delinque.
Así, ha estado preso en el Reclusorio Oriente, en el Sur, en un Penal Federal de Máxima Seguridad en Durango… y siempre queda en libertad.
De acuerdo con reportes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) hace unos días fue detenido de nueva cuenta por elementos de la Policía capitalina en la zona de Tlalpan.
El informe de la corporación detalla que recibieron una denuncia en la que vecinos informaban que un hombre con la cara tatuada se había metido a robar una casa. Cuando los agentes llegaron encontraron el lugar cerrado.
Tocaron y nadie abrió. Sin embargo, desde la parte alta de la casa un hombre les lanzó las llaves y les pidió que entraran pues había un sujeto con una navaja amenazando a su padre.
Cuando entraron al domicilio los policías lo hallaron con el cuchillo en la mano amagando al anciano e intentando saquear el domicilio. En menos de dos minutos los elementos llegaron al lugar, cercaron la casa, entraron a ella y encontraron al sujeto. Así fue detenido por cuarta ocasión. Lo remitieron al Ministerio Público de la fiscalía en Tlalpan.