Estados Unidos volvió este jueves al Consejo de Derechos Humanos de la ONU tras una ausencia aprovechada por China para influir en ese órgano, al que también accedieron Paraguay y Honduras y en el que Argentina renovó su mandato.
Dieciocho países eran candidatos para cubrir otros tantos puestos a partir del 1 de enero. Estados Unidos obtuvo 168 votos y Eritrea, país acusado de violaciones a los derechos humanos, 144.
Además fueron elegidos Argentina, Honduras, Paraguay, Finlandia, Luxemburgo, Benin, Camerún, Gambia, Somalia, Emiratos Árabes Unidos, India, Kazajistán, Malasia, Catar, Lituania y Montenegro.
En la elección, algunas ONG acusaron a los grupos regionales de haber presentado el mismo número de candidatos que de puestos vacantes -una "farsa electoral" para UN Watch- y de no haber frenado las candidaturas de países autoritarios.
Le elección de Eritrea volvió a poner sobre la mesa la cuestión de la presencia de regímenes autoritarios y poco respetuosos con los derechos humanos en la máxima instancia de la ONU encargada de velar por ellos.
La salida de Estados Unidos de esta institución en 2018 bajo la presidencia de Donald Trump, que acusó al consejo de hipocresía y de ensañarse contra Israel, dejó el campo abierto a China para expandir su influencia.
Junto a socios como Bielorrusia o Venezuela, aprobaron en los últimos años declaraciones conjuntas respaldando la acción de Pekín en Hong Kong, Tibet o Xinjiang, o denunciando "violaciones de derechos humanos" en países occidentales como, por ejemplo, contra los indígenas de Canadá.
Con información de AFP
Imagen: AFP