La semana pasada nos enteramos de que uno de los miembros del equipo de seguridad más cercanos al presidente Donald Trump, quien supervisaba la comida, dio positivo a la prueba de contagio del Covid-19 y para preocupar más a las a las autoridades de la Casa Blanca resulta que la vocera del vicepresidente Mike Pence, también está infectada.
Al interior de la Casa Blanca, la residencia presidencial, corre libremente el Coronavirus.
De manera inusual la Unidad Médica de la Casa Blanca notificó que un elemento de las fuerzas armadas que trabaja al interior de la que es “la residencia más segura y protegida de todo el país”, resultó positivo por coronavirus en los exámenes semanales que se realizan.
Con el transcurso de los días se fueron conociendo detalles sobre este suceso que causó alarma y caos en el ala oeste del inmueble. El elemento de seguridad pertenece a la marina y está asignado a la vigilancia y cuidado de los alimentos del presidente Trump. El equipo médico encargado exclusivamente de la salud del mandatario le realizó el miércoles pasado, después de que se conoció el resultado, una prueba de contagio a la cual dio negativo.
A partir del jueves pasado todo el personal que trabaja en la Casa Blanca es sometido diariamente a un exámen de contagio del Covid-19. Sin embargo, el virus SARS-2 está cómodo en la residencia presidencial y haciendo de las suyas, el viernes pasado se supo que la vocera del vicepresidente Mike Pence también resultó estar contagiada.
Kate Miller, además de ocupar la vocería de Pence, se desempeña igualmente como portavoz del equipo especial ante la pandemia del Coronavirus del gobierno y, es la esposa de Stepher Miller, asesor cercano en asuntos migratorios de Donald Trump. El tercer caso de contagio en la Casa Blanca lo dio un asesor personal de Ivanka Trump, del cual se han reservado los datos.
Tanto el presidente y como vicepresidente a raíz de estos sucesos se someten a diario a las pruebas de contagio de este mortal virus. Hay que destacar que el mandatario está por cumplir 74 años y su vicepresidente Pence, cumple en unas semanas 61.
La emergencia sanitaria en los Estados Unidos a pesar de los discursos, tweets y mensajes del presidente Trump, no está controlada y mucho menos se puede decir que se ha superado los contagios que suman el millón 300 y los fallecidos se acercan a los 80 mil. Ninguno de los 50 estados registra cero en alguno de estos departamentos y como dicen los especialistas la curva está aún lejos de aplanarse.
La reapertura económica de más de 25 estados responde a presiones económicas y electorales, no nos engañemos.