Columnas
A pesar de que en febrero pasado volvieron a incrementarse las cifras de detenidos al intentar ingresar sin documentos a los Estados Unidos, la ola migrante parece haber perdido fuerza.
Y es que el número de arrestos de personas en febrero respecto al mes anterior, bajo, se da en un momento en que la inmigración preocupa cada vez más a los votantes, a pesar de que las cifras siguen siendo de las más bajas de la presidencia de Joe Biden.
De acuerdo con información difundida el fin de semana por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) los agentes de la Patrulla Fronteriza realizaron 140.644 detenciones de personas que intentaban ingresar al país por sitios ubicados entre los puestos fronterizos legales durante febrero.
En plena carrera electoral estas cifras a la baja forman parte de una serie de datos relacionados con la inmigración, el comercio y las incautaciones de fentanilo que de forma mensual da a conocer la CBP.
La atención de los políticos, sobre todo, en estos informes son muy detalladas en un momento de intenso escrutinio de los partidos y los estrategas de campaña, lo que busca es conocer la respuesta de sí el gobierno de Biden tiene el tema bajo control, no hay nada más importante.
Los republicanos y Donald Trump, -virtual candidato a la presidencia- han dicho que las políticas de Biden han alentado a los inmigrantes a intentar entrar a Estados Unidos y que la frontera está fuera de control.
En contraparte el gobierno federal y con ellos los demócratas que no existen voluntad política para financiar un proyecto de ley clave sobre seguridad fronteriza, y argumenta que lo que está ocurriendo en la frontera sur forma parte de un fenómeno mundial de más personas que huyen de sus hogares en busca de seguridad.
Estas alentadoras cifras fueron dadas a conocer luego de un diciembre en el que la Patrulla Fronteriza efectuó 249.785 arrestos y que puso de nueva cuenta en el centro de la agenda pública la cuestión migratoria y los ingresos sin documentos a territorio estadounidense.
Desde la Casa Blanca se impulsa la narrativa de que este descenso endiciembre, enero y febrero, de debe al impulso que ha recibido las acciones de cooperación con México en busca de controlar la inmigración. Los números alentadores, es el resultado de la buena política que sobre el tema realiza la administración Biden, dicen los demócratas.
Sin embargo, los republicanos han criticado cada vez más el uso de la de los permisos humanitario que se han incrementado, por considerar que eluden las leyes de inmigración del país para admitir en él a personas que, de otro modo, no cumplirían los requisitos para ser admitidas.
La política y la realidad.
@ncar7