Columnas
Después de conocer el segundo triunfo consecutivo de Donald Trump en la elección primaria de los republicanos, para elegir candidato presidencial ahora en New Hampshire, nadie detendrá a este polémico político-empresario Donald Trump.
La esperanza de la exgobernadora por Carolina del Sur, Nikki Haley, por alcanzar el triunfo, el martes pasado se derrumbaron, igual que su camino para llegar con los republicanos a la Casa Blanca.
Trump, se ve imparable y cada día más fuerte de ser el nominado de manera oficial para llegar a la cita electoral de noviembre próximo, se enfrentará por segunda ocasión a Joe Biden.
Sin embargo, no se puede negar la incertidumbre que acompaña al mismo Trump y a la gran mayoría de los republicanos en torno a la guillotina judicial que amenaza con terminar con las aspiraciones, intenciones y hasta sueños de millones de estadounidenses.
El martes, existía alguna esperanza de triunfo de Nikki Haley, pero un golpe de realidad terminó con todo este castillo de esperanzas.
Lo cierto es que Donald Trump pisa con más fuerza el terreno electoral que parece lo llevará a enfrentarse a Joe Biden, en un cara a cara, que a pesar de todo lo que se dice, será una reedición de 2016.
El triunfo de New Hampshire no deja contentos ni a republicanos, ni a demócratas y, eso sí, abona a la incertidumbre, el encono y a los días difíciles que amenaza para noviembre próximo.
La exembajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, sufrió una dura derrota en el estado donde había apostado fuerte por su campaña. Hay que recordar que el fin de semana pasado Haley quedó como la única contendiente de peso tras el retiro del gobernador de Florida, Ron DeSantis, y trató de presentarse como una alternativa moderada y renovadora frente a Trump. Sin embargo, sus ataques al exmandatario, a quien acusó de tener un deterioro mental, no convencieron a los votantes.
Haley, tenía una única duda en estos comicios, saber de qué tamaño sería su derrota. Todo lo que sea perder por menos de 10 puntos frente a Trump será considerado un éxito, no tanto porque le de alguna posibilidad de ganar las primarias, sino porque le permitirá tomar oxígeno electoral y financiero, y eso, es más importante para aguantar al menos un mes más.
El equipo de Haley coincide en que, aunque los dos candidatos de relevancia que se han retirado, Vivek Ramaswamy y Ron DeSantis, han apoyado a Trump, lo que en teoría da más votos al expresidente, también le da a ella más libertad de acción y preparación. Las primarias están divididas entre Trump y su núcleo duro MAGA (‘Hacer Grande a Estados Unidos Otra Vez').
@ncar7.