Tamara de Lempicka: Arte y disrupción

Por Óscar Roa

Polémica, atrevida y genio del arte, esta es la historia de una pintora considerada una de las máximas representantes del Art-Decó, a continuación: Tamara de Lempicka.

Desde los 12 años de edad, parecía que esta inusual artista estaba destinada por completo al arte, específicamente a la pintura, pues, a esa edad hizo su primer cuadro, un retrato de su hermana. Sin embargo, sería la historia misma la que moldearía a esta mujer para convertirla en una pintora sinigual. Debido a la Revolución rusa en 1917, tuvo que escapar, junto con su familia completa, por lo que terminaron asentándose en París. Al ser de una familia acaudalada y perder una gran fortuna tras el escape, decidió dedicarse por completo al arte, estudiando con los maestros Maurice Denis y André Lhote.

Con una obra distintiva, se puede notar una gran cantidad de influencias que van desde el cubismo, pero mezclado con arte renacentista y manierista, debido a el uso suave de figuras geométricas combinado con su especialidad tanto en retratos como en desnudos.

A 122 años de su natalicio, se recuerda a esta destacada artista no solo por sus piezas pictóricas, también por haber sido un símbolo disruptivo de las costumbres sociales de su época, sobre todo en el papel que debía cumplir como mujer. Haciendo memoria sobre la vida y obra de Lempicka, quien falleció en Cuernavaca en 1980, se deja un enlace con algunas de sus obras: http://www.tamaradelempicka.org/paintings/