Rocío se queda sin argumentos
“El @GobiernoMX es respetuoso de las decisiones del Poder Judicial, cualquier controversia vamos a combatirla en los tribunales con argumentos sólidos para mantener la confiabilidad del SEN (Sistema Eléctrico Nacional)”, respondió Rocío Nahle, titular de la Secretaría de Energía, luego de difundirse que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) respaldó a la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) para detener los acuerdos dictados por la dependencia sobre la generación eléctrica a través de renovables en el país. Así de claro y sin más respuesta de la Sener, la Corte dio entrada a la controversia constitucional que interpuso la Cofece contra la Política de Confiabilidad del sistema eléctrico que obligó Sener a publicar el pasado 15 de mayo… Alguien se equivocó.
Pide AMLO que se disculpe El Güero Castañeda
Clasista y racista son dos de los adjetivos que han venido a acompañar a quien durante años se consideró un joven y hombre de izquierdas: Jorge Castañeda, excanciller de Vicente Fox y aspirante independiente a la presidencia de México. En días recientes, en su papel de analista, Castañeda describió con desprecio a un pueblo de Oaxaca. Putla, dijo, es un pueblo arrabalero, horrible, sugiriendo el pinche que no se animó a decir en pantalla, dejando aflorar una visión de poco aprecio a las comunidades mexicanas. En el programa televisivo de análisis, el excanciller estaba acompañado del “intelectual orgánico” —AMLO_dixit— Héctor Aguilar Camín y el anfitrión, Leo Zuckermann, quienes celebraron el comentario del Güero Castañeda. Para el presidente, hay algo bueno en este episodio: sacó a flote el pensamiento conservador. Simulaban, reprocha, ser liberales, progresistas, de avanzada, y no, son muy retrógradas. Y sumó a Denise Dresser y al exmandatario Felipe Calderón. “Si esto dicen en público, imaginen qué hacen en privado”, advirtió López Obrador. ¿Habrá disculpas del Güero Castañeda?
Facebook paga por arropar el racismo
Al menos 100 empresas de la talla de Levi’s, Unilever, Starbucks y hasta Coca Cola han decidido sacar su publicidad de la red social más grande del mundo por no pronunciarse respecto a los comentarios racistas de Donald Trump y de supremacistas blancos en Estados Unidos. Su tibieza hasta ahora tiene un costo de 50 mil millones de dólares del valor de la tecnológica, cuyos títulos cayeron 8 por ciento en Bolsa. No es la primera vez que Facebook enfrenta una crisis económica por sus errores. En 2018, las acciones de la empresa se desplomaron en Wall Street, generando pérdidas de 120 mil millones de dólares por filtrar datos personales de sus usuarios a Cambridge Analytica.