Bienvenidos al 2022, año que marca el inicio de los tres años con mayor actividad política en el país, para abrir bocado tendremos durante los siguientes 2 meses, la batalla por la revocación de mandato, donde los diferentes actores políticos y sus partidos se dejarán ir con todo, unos a favor y otros en contra, pero eso sí; todos dirán que es por una causa justa y para los ciudadanos.
Muchos lo verán como una gran desventaja para asegurar la gobernabilidad del país y otros lo verán como la oportunidad perfecta para consolidar sus proyectos personales en contra de la democracia y las instituciones, por lo que los ciudadanos debemos de estar pendientes de las cosas realmente importantes y no cegarnos con nubes de humo que nos obstaculizan ver con claridad lo que sucede.
Los que van a enfrentar grandes retos serán los municipios, principalmente los del estado de México, que como regalo de año nuevo cambiaron de administración y por lo tanto, muchos de ellos se encontrarán en quiebra como Toluca y Naucalpan, a los cuales les costará organizar y convenir sus planes de Desarrollo Municipal 2022-2024, ya que sus ayuntamientos estarán conformados por primera vez por un grupo multi representativo, ya que ninguna corriente partidista tiene la mayoría y tienen en puerta las elecciones estatales en el 2023 y las federales y municipales para el 2024, lo que conlleva a la consolidación del proyecto actual de nación de la 4 T o a la reconducción de las políticas públicas para garantizar un real desarrollo.
Veremos una infinidad de propuestas de todos los órdenes de gobiernos; unas totalmente disparatadas como la que informó el Diputado Leobardo Alcántara Martínez, donde asegura que va proponer la desaparición del impuesto predial en cuanto inicie trabajos la legislatura federal, sin darse cuenta que el eliminar el impuesto, sería darle un tiro de gracia a los 2 458 municipios del país, al ser éste su principal fuente de ingresos, aunado a las propuestas de eliminación de Instituciones autónomas tal como acaba de suceder el pasado 31 de diciembre que por decreto se desaparece al Instituto Nacional de Desarrollo Social, obras faraónicas y promesas de un México mejor, algunos argüirán que es por la austeridad democrática o más bien franciscana y asistencialista, otros por la lucha de la libertad y la democracia, todas ellas para el desarrollo nacional.
La única verdad es que va dirigido a conseguir el voto; por los que serán los que gobiernan y administran los municipios en coordinación con sus gobiernos estatales y/o federal, quienes podrán hacer la diferencia al impulsar de forma asertiva el desarrollo integral y sustentable de sus pobladores y comunidades.
Así que estemos al pendiente de lo que realmente es relevante, para que en el momento adecuado decidamos cual es el país que queremos.
Javier Agustín Contreras Rosales. Colaborador de Integridad Ciudadana AC, Contador Público, Maestro en Administración Pública @JavierAgustinCo @Integridad_AC