Columnas
*Este fin de semana en las elecciones presidenciales y parlamentarias en la isla, ganó la continuidad y el sí para mantener la autonomía respecto al gigante asiático
El costo de una guerra mediante la cuál China, que ha reclamado desde siempre soberanía sobre la isla de Taiwán, sería muy elevado, tanto que superaría muchas estimaciones que se han realizado a lo largo de los años previos.
Como preámbulo, podemos señalar que Taiwán tuvo elecciones este fin de semana en las que el candidato del partido gobernante, Lai Ching-te, salió victorioso de las elecciones presidenciales de Taiwán; China había mostrado su oposición a la candidatura de Lai por su postura a favor de la independencia de la isla.
El demócrata Lai Ching-te ha ganado las elecciones en Taiwán, el candidato del partido KTM admite su derrota.
El sábado por la tarde, hora de la ciudad de México y ya con la mitad de los votos escrutados, el candidato del gobernante Partido Democrático Progresista de Taiwán, Lai Ching-te, lideraba los conteos; las elecciones presidenciales y parlamentarias en Taiwán marcarán la trayectoria de las relaciones de la democracia autogobernada con su vecino China en los próximos cuatro años. Está en juego la paz y la estabilidad de la franja de unos 160 kilómetros entre la China continental y la isla autogobernada, que Pekín reclama como propia.
Pekín ha mostrado su oposición al actual vicepresidente Lai Ching-te; Lai y la actual presidenta, Tsai Ing-wen, han rechazado las reclamaciones de soberanía de China sobre Taiwán, una antigua colonia japonesa que se separó del continente en medio de una guerra civil en 1949. Sin embargo, se han ofrecido a hablar con Pekín, que se ha negado repetidamente a mantener conversaciones y les ha llamado separatistas.
En este contexto, una análisis de Bloomberg economics señala que si llegara a proclamarse una guerra entre China y Taiwán, el costo sería de alrededor de 10 billones de dólares, equivalente al 10% del PIB mundial, superando con creces el impacto de la guerra en Ucrania, la pandemia de Covid y la crisis financiera global.
Aunque pocos consideran que pueda ocurrir una invasión china, los antecedentes de las guerras ocurridas en Ucrania y recientemente en Gaza, hacen temer a otros que no descartan escenarios y toman medidas para protegerse del peor de los escenarios. Es tal la preocupación, que, según Jude Blanchette, del Centro para Estudios Estratégicos Internacionales, el interés de las empresas multinacionales con las que trabaja ha "explotado" desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia en 2022. Según él, "el tema" surge en el 95% de las conversaciones.
Para modelar el costo de una crisis, Bloomberg economics ha establecido dos escenarios: una invasión china que involucre a Estados Unidos en un conflicto local y un bloqueo que corte a Taiwán del comercio con el resto del mundo.
En el primer escenario, en el caso de una guerra, la economía de Taiwán sería "devastada". Según estimaciones de Bloomberg Economics basadas en conflictos recientes comparables, el PIB sufriría un golpe del 40%. Por su parte, el PIB de China sufriría una disminución del 16.7% si las relaciones con sus principales socios comerciales se interrumpieran, y no hubiera acceso a semiconductores avanzados. Para Estados Unidos, que está más lejos del centro de la acción, pero aún tiene mucho en juego, el PIB disminuiría 6.7%.
Para el mundo en su conjunto, estima el estudio, el PIB disminuiría 10.2%, afectando principalmente a Corea del Sur, Japón y otras economías del este asiático. "Un supuesto clave en este escenario es que Estados Unidos tendría éxito en conseguir aliados para imponer sanciones económicas severas contra China", dice Bloomberg.
En el segundo escenario, Bloomberg Economics muestra el impacto que tendría para la economía mundial un bloqueo a Taiwán por parte de China durante un año: "Para Taiwán, una economía pequeña y abierta que ha prosperado a través del comercio, el PIB disminuiría 12.2% en el primer año. Para China, Estados Unidos y el mundo en su conjunto, el PIB disminuiría 8.9%, 3.3% y 5% respectivamente en el primer año.
Parece que la guerra no conviene a nadie, y que Taiwán a pesar de las constantes amenazas provenientes de China seguirá siendo independiente, pero lamentablemente a veces se toman decisiones en las que el bien de la economía y de la humanidad en general importan poco menos que nada. Ojalá nunca sea este el caso.