Cómo lo previmos en este espacio, el movimiento de productores de maíz y trigo incrementó sus protestas y desde Baja California, Sonora, Tamaulipas y Sinaloa empiezan a mover a agricultores de Chihuahua, Michoacán, Jalisco y del Bajío.
Hace unos días no fueron uno, sino diez, los estados los que ya marcharon y protestaron, tomando carreteras y casetas, instalaciones de Petróleos Mexicanos (Pemex), el aeropuerto internacional de Culiacán y oficinas estatales de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), con la demanda de que se incremente el precio de garantía y las cosechas se adquieran en su totalidad. Ni la intervención de hasta ahora Secretario de Gobernación, Adán Augusto, ayudó.
El tema es complejo y, como en una tormenta perfecta, se conjuntaron diversos factores que propiciaron este escenario: Un incremento productivo en las cosechas de maíz y trigo, principalmente en Sonora y Sinaloa; caída de los precios de los granos en la Bolsa de Chicago ante menor demanda mundial; altos costos de producción (fertilizante, gasolina, etc); tipo de cambio con un dólar débil (a nuestros productores si afecta la baja peso frente al dólar), además de que la mayoría de los productores no compró coberturas para este año.
Ahora, resolver este asunto requiere de la voluntad y participación de todos los involucrados en el tema, empezando por los industriales y bodegueros, pero, sobre todo, de la suficiencia presupuestal que pueda proporcionar la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para incrementar las compras de Segalmex.
Deberán ahora comprar caro y vender barato; también será importante que Segalmex pueda flexibilizar sus reglas de operación y que exista mayor involucramiento de los gobiernos estatales y nos referimos, por supuesto, al tema presupuestal. Además publiquen las reglas, lo cual no han hecho.
Es interesante la posición de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, que ya ha planteado la necesidad de la reconversión de cultivos, que sean rentables pero que también respondan a las características de la zona (clima y disponibilidad de agua) y que atiendan nichos específicos de mercado y evitar así una sobreoferta.
Y vaya que hay demanda de ciertos productos, como el sorgo y la chía.
Para esta última propuesta también es necesaria la participación de los gobiernos estatales, con financiamiento y otras facilidades, que permitan que nuestro campo siga siendo motor de desarrollo y bienestar. Por lo pronto las negociaciones continúan y el diálogo sigue abierto. Esperemos una pronta solución.
Apoyaron en este sexenio al pequeño, pero se olvidaron del mediano y grande productor, principalmente generadores de nuestra nación.
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• Van México y Dinamarca por fortalecer sector porcícola
México y Dinamarca llevarán a cabo este año acciones de cooperación estratégica en el sector porcícola, con el objetivo de fortalecer los altos estándares en productividad sostenible, salud animal, sanidad e inocuidad, en favor de la porcicultura de las dos naciones.
El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, y el embajador de Dinamarca en México, Kim Hojlund Christensen, subrayaron la importancia de ampliar la cooperación a favor del sector agroalimentario, de productores y consumidores, así como de la seguridad alimentaria a nivel nacional como internacional.
Bien por esta reunión que, estamos seguros, estrechará los lazos de cooperación entre ambos países, tan necesarios ante el actual panorama mundial que enfrentamos.
LUIS P. CUANALO
• Especialistas del sector agropecuario
• Presidente del Colegio de Ingenieros Agroindustriales de México, A.C
luiscuanalo@hotmail.com