REUTERS
Bajo la amenaza de Estados Unidos de imponer aranceles, el presidente mexicano se comprometió a hacer que su país sea menos dependiente de la demanda estadunidense, pero, en un giro irónico, las exportaciones a su vecino del norte han sido una de las pocas cosas que han frenado una recesión en México este año.
La economía mexicana repuntó un 0.1 por ciento entre abril y junio según datos preliminares publicados el miércoles, tras contraerse el trimestre anterior, apenas evitando una “recesión técnica” que habría significado un duro revés para el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
No obstante, el fantasma de la recesión sigue latente incluso para este año, pues México envía el 80 por ciento de sus exportaciones a Estados Unidos y esa dependencia podría agravar el riesgo de que ocurra si continúa el debilitamiento que empieza a evidenciar la industria estadunidense.
Datos oficiales muestran que la demanda estadounidense de productos manufacturados en México fue uno de los pocos puntos brillantes en un horizonte económico por lo demás nublado.
“El crecimiento de las exportaciones es el componente más dinámico del PIB del 2019 sin duda, a pesar de que está creciendo menos (que los dos años previos)”, dijo el economista Luis de la Calle, un exfuncionario mexicano de comercio.
Sin esa demanda estadunidense, la economía de México enfrentaría tiempos más difíciles, agregó.
Arrastrada por la minería, la construcción y la generación de energía, la producción industrial cayó un 1.6 por ciento en los primeros cinco meses de 2019. El único sector industrial que contrarrestó la tendencia fue la manufactura orientada a la exportación, que avanzó un 1 por ciento en términos reales.
La economía mexicana creció un 0.3 por ciento en el primer semestre de 2019, mientras que las exportaciones aumentaron un 4.2 por ciento en valor, lideradas por una fuerte demanda de bienes de los sectores automotor, de equipos de cómputo y electrónico.
La guerra comercial entre Estados Unidos y China ha ayudado a impulsar a México a la cima de la lista de los principales socios comerciales de la primera economía mundial en 2019.
Pero el crecimiento de Estados Unidos se está desacelerando y la Reserva Federal redujo su tasa de interés de referencia por primera vez desde 2008 para apoyar a la economía.