Daniel Montes de Oca
El Presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció que a partir de este sábado 17 de octubre el país volverá a entrar en estado de emergencia por el aumento de casos de COVID-19 y con toque de queda en varias ciudades.
El toque de queda se impondrá a partir de la medianoche del sábado de las 21 h y hasta las 6 h y tendrá una duración de cuatro semanas para frenar los contagios. Las ciudades son: París, Aix-Marsella, Lille, Grenoble, Lyon, Toulouse, Montpellier, Saint-Etienne y Rouen.
Macron consideró como pertinente el aplicar un toque de queda en territorio galo, asegurando que las localidades antes mencionadas han producido un aumento en los casos de la enfermedad respiratoria.
“El objetivo es reducir los contactos sociales. No es una prohibición de circular, sino una limitación estricta”.
El mandatario agregó que es necesario que los habitantes limiten los desplazamientos con fines de ocio.
"No iremos más a restaurantes a partir de las 21:00 horas, ni a ver a amigos o a celebrar fiestas”, indicó.
Para garantizar el cumplimiento de la normativa, el Presidente señaló que habrá controles y mutas de hasta 135 euros para quienes ignoren el toque de queda en las ciudades.
Además, habrá permisos especiales para las personas que vayan o vuelvan de sus trabajados durante el tiempo del toque de queda, así como para aquellos que tengan una emergencia que los obligue a salir de sus hogares.
Imagen: Reuters