Impulsemos la lactancia materna: educar y apoyar

Esta iniciativa que a nivel global es impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1990, en México desde 2013, un grupo de organizaciones de la sociedad civil, organismos internacionales e instituciones académicas han impulsado con el objetivo de impulsar acciones en favor de la madre y el niño, y que este año el día de ayer llevaron a cabo el 7º. Foro Nacional de Lactancia Materna 2022, para resaltar lo que tanto médicos e investigadores han dicho acerca de la leche materna, y de la que han subrayado que su importancia no solo radica en el aporte nutricional e inmunológico perfectamente adaptado para el infante, sino en que, quizás es la medicina personalizada específica más avanzada que reciben los infantes para toda su vida, además de que promueve el vínculo entre la madre y su bebé, independientemente del entorno, y proporciona seguridad alimentaria al infante, desde el principio de su vida.

Esta iniciativa, cobra su importancia porque la lactancia materna se ha visto amenazada por la aparición de los “sucedáneos”, que es la forma en la que se designa a las leches que sustituyen parcial o total a la leche materna, y es que desde la década de 1970 las empresas y los laboratorios comienzan a producirlos masivamente y el consumo comienza a aumentar en detrimento del amamantamiento natural.

Por lo que, a OMS y UNICEF con el fin de detener la publicidad indiscriminada de promoción de la leche artificial, y observando que existía un vacío legal respecto a la producción, difusión y venta de los sustitutos, en 1981 se aprueba el Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna de la OMS con el fin de evitar que las estrategias comerciales de estas empresas den como resultado que las madres decidan dejar de amamantar de forma natural, total o parcialmente a sus hijos, reemplazando su leche por productos artificiales.

El Código aboga por el amamantamiento de los lactantes, en caso de que existieran motivos para no poder ser amamantados, también aboga por alimentar a los lactantes de forma segura con la mejor alternativa nutricional disponible, enfatizando que los sucedáneos de la leche materna deben estar disponibles cuando se necesiten, pero no deben promoverse.

Sin embargo, el Código y las acciones que las instituciones de salud pública han impulsado no han dado los resultados esperados, ya que desafortunadamente en México únicamente 3 de cada 10 niñas y niños son amamantados de forma exclusiva durante sus primeros 6 meses de vida, cifra que lo coloca como uno de los países con los niveles más bajos de lactancia materna ñ en toda América Latina y cuyo sector empresarial presenta serias fallas en cuanto a cumplimiento del Código Internacional de Sucedáneos de la Leche Materna, lo que, además viola el derecho de todo niño y niña a alcanzar su pleno potencial gracias a una sana nutrición durante sus primeros años de vida, como lo señaló Mauro Brero, Jefe del Área de Nutrición de UNICEF en México.

Además, otro estudio realizado por UNICEF, el Instituto Nacional de Salud Pública, la Organización Panamericana de la Salud, la Secretaría de Salud y la Universidad Iberoamericana evidenció que más de la mitad de las madres encuestadas recibió recomendaciones de alimentar a su hijo o hija con algún producto lácteo comercial, principalmente por parte de profesionales de la salud (más del 60).Sumado a esto, en el ámbito laboral faltan políticas que favorezcan un ambiente adecuado para realizar la lactancia materna: extracción de leche o su almacenamiento, no hay flexibilidad en los horarios que cumplan con lo establecido en el artículo 170 de la Ley Federal del Trabajo.

Esto obliga a los diferentes niveles de gobierno a revisar que está sucediendo en torno a este tema y buscar una mayor inversión en políticas y programas de apoyo a la lactancia materna, especialmente en entornos frágiles y de inseguridad alimentaria; dotar a los trabajadores de la salud y la nutrición las competencias necesarias para proporcionar a las madres un asesoramiento de calidad y un apoyo práctico que les permita amamantar a sus hijos de forma adecuada; exigir la aplicación plena del Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna; y establecer políticas favorables a la familia que proporcionen a las madres el tiempo, el espacio y la ayuda que necesitan para amamantar, objetivos todos que la UNICEF y la OMS plantean para garantizar una vida que les garantice el acceso a la alimentación, a la salud, al desarrollo integral de las niñas y niños.