Bajar de peso 30 kg no es cosa fácil, por experiencia personal les platico que vaya no lo es, sin embargo para lograrlo se requiere de mucha disciplina, fuerza de voluntad y decisión de cambiar para mejorar, y eso fue lo que logró la nueva campeona del mundo del CMB y OMB, Alejandra Tigre Jiménez.
Una mujer con una gran sonrisa y mucho carisma perteneciente a la promotora Cancún Boxing de Pepe Gómez, ha tocado el “top” boxístico y ha conseguido el cinturón verde y oro del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) venciendo en una gran pelea en San Antonio, Texas a la estadounidense Franchon Crews, misma que ha aceptado ya la revancha y será el combate en el Caribe mexicano.
La vida está llena de retos y objetivos, el mundo de las narices chatas y orejas de coliflor no es fácil y para trascender hay que trabajar duro. Samuel Uribe entrenador de la Tigre Jiménez ha destacado la obediencia en los entrenamientos de preparación y sobre todo sobre el ring, situación que está dando frutos.
Alejandra nacida en la Ciudad de México encontró en Cancún su casa y la calidad de vida que este Paraíso le ha dado, ha sido motor de motivación para levantarse todos los días y dar gracias por estar en donde está.
El sacrificio no dejará de hacerse para continuar por el sendero del triunfo, la campeona de los pesos súper medios está consciente de lo que sigue, si bien es cierto, que ha tocado lo Máximo en su deporte a su corta edad, siempre tendrá los pies sobre la tierra para no desviar sus objetivos.
Lo positivo en ella también es su temperamento con la gente y la afición, muy humilde y sobre todo accesible para seguir construyendo.
Con un estilo ortodoxo sobre el cuadrilátero, lleva su carrera con inteligencia, la cual la considera como su principal profesión y por ende respeta este deporte y jamás insultará a un rival.
Cabe mencionar que la mexicana es la primera en presumirse como campeona en peso supermedio y peso pesado, ya que este último lo había conseguido anteriormente cuando tenia 32 kilogramos de más.