Por Onel Ortíz Fragoso
@onelortiz
El tiempo avanza inexorablemente. En seis semanas la sociedad acudirá a su cita con las urnas. Hablamos de cuántos votarán y qué determinará las preferencias del electorado en las elecciones para diputados federales, quince mandatarios estatales, cientos de diputados locales y miles de presidentes municipales. Las circunstancias cambian por región o estado, pero en la elección para diputados federales, que se ha convertido en la más importante para el Presidente de la República y para la oposición, hay cinco variables que determinarán el resultado.
De acuerdo a las tendencias electorales de 1988 a 2018, en las llamadas elecciones intermedias como son las del 6 de junio próximo, la participación electoral se ubicará entre el 40 y 50 por ciento del padrón electoral, un intervalo de 10 puntos entre el límite inferior y el limité superior.
Uno. El contexto sanitario y económico. Varios factores determinan el ánimo social. En este proceso, tres variables deben seguirse con atención: la mortalidad producto de la pandemia, el avance de la vacunación contra el Covid-19 y el número de desempleados y negocios cerrados desde marzo del año pasado. Curiosamente, la inseguridad no ha afectado sensiblemente los procesos electorales, salvo excepciones.
Dos. El apoyo del presidente en cada entidad. Pronto se sabrá si los esfuerzos del Presidente López Obrador por estar en la agenda nacional, los programas sociales federales y los servidores de la nación son capaces de convocar a la ciudadanía a las urnas, no como en el 2018, pero sí para conservar la mayoría.
Tres. El apoyo social del gobernador en turno y en las entidades con elección a gobernador, las preferencias de las y los candidatos. Comúnmente se dice que las elecciones intermedias dependen de los gobernadores. Sin duda, los mandatarios estatales operarán con todos los recursos a su alcance, espero que en el marco de la ley, y donde haya renovación de gobernador, los candidatos jalarán el voto de los otros puestos en disputa.
Cuatro. El perfil de los candidatos a diputados y el grado de organización y operación de los partidos políticos. Los partidos optaron mayoritariamente por la reelección de sus diputados, la gran incógnita es como la ciudadanía reaccionará ante este hecho. También será un termómetro para saber el nivel de organización de los partidos, no sólo de Morena, que es un caos, sino de las maquinarias electorales del PRI, PAN, PRD o del SNTE.
Cinco. Las tendencias electorales. La coyuntura de 2018, fue excepcional y nunca se repetirá. Lo más probable es que en cada distrito las tendencias electorales se acercarán a los promedios de elecciones pasadas. Después de revisar las variables, la conclusión es sencilla: la mayoría de la Cámara de Diputados está en el aire.