El senador Ricardo Monreal tuvo que levantar la mano y hacer valer su voz para que le reconocieran su aspiración legítima dentro del partido de Morena donde, por cierto, es militante y fundador- que se sumó a las tareas para darle vida orgánica a la expresión lopezobradorista.
Eso explica su reacción, pero sobre todo el reconocimiento del presidente López Obrador desde la máxima tribuna de la mañanera. De hecho, tuvieron que pasar más de 11 meses para escuchar el nombre del coordinador de los senadores de Morena en Palacio Nacional; con ello, vino un anuncio de viva voz del mandatario quien reconoció, ante la prensa, que no hay nada que impida que Ricardo Monreal participe. El punto es que, con honestidad, hizo referencia al zacatecano al incluirlo a la lista de presidenciables.
A partir de ello, se rompió una racha de acceso a la lista de presidenciables, al menos desde Palacio Nacional ya que, en virtud de lo que la sociedad civil manifiesta, es todo lo contrarió: Ricardo Monreal ha sido reconocido no sólo por la prensa nacional, sino por grandes sectores de la ciudadanía, incluso una avalancha social que coreó su nombre al grito de ¡presidente, presidente, presidente!, en una gira por Quintana Roo.
Quizá esa fuerte presión hizo entrar en sintonía al propio presidente López Orador para que reconociera la aspiración legítima de Ricardo Monreal a fin de participar en la elección interna de Morena.
De entrada, eso es sumamente valioso porque, la voz del presidente en tribuna de la mañanera, es altamente poderosa tanto para influir, como desfavorecer. En este caso, los comentarios para Ricardo Monreal han sido positivos; en un momento le reconoció su trabajo y lo llamó precursor del movimiento no sólo en los procesos electorales celebrados en el que ha dado su respaldo incondicional al mandatario, sino por su papel clave dentro del legislativo federal en el que se ha convertido en el gran soporte de la política de la 4T.
De hecho, el zacatecano prestó mucha atención a la conferencia matutina del presidente López Obrador y le reiteró, como lo ha hecho en más de 25 años de acompañar al mandatario, que seguirá impulsado su esfuerzo para que la 4T siga consolidándose en el país. Asimismo, ratificó que es un militante de Morena y, por consiguiente, luchará por la candidatura porque hay una trayectoria política y social que lo respalda en la carrera por la silla presidencial.
Su experiencia, así como la capacidad para construir acuerdos son prueba suficiente para manifestar las credenciales del senador y líder de la fracción de Morena en la Cámara Alta. Además, una de esas características es, por mucho, que está a la altura de los grandes desafíos que constituye abanderar un proyecto del tamaño de la 4T.
Finalmente, llegó el momento que una inmensa manifestación de simpatizantes y militantes, así como la sociedad en general que simpatizan con el proyecto de Ricardo Monreal esperaban- ya que siempre empujaron para que se le reconociera; por ende, quedaron satisfechos con las palabras del presidente al reconocer, con méritos propios, que el zacatecano merece estar en la lista de presidenciables de Morena. Se lo ha ganado con trabajo.
Al darse esas condiciones de equidad desde Palacio Nacional, solo queda que, el partido, diseñe mecanismos e instrumentos con reglas de participación transparentes y equitativas planteadas para sacar adelante un tema de gran interés público. Aunque, siendo congruentes, la encuesta que sigue planteando el presidente es un método desgastado y cuestionado por amplios sectores del propio partido. Por ello, en efecto, la elección primaria constituye la alternativa más viable y democrática que puede terminar con la zozobra que alimenta un mecanismo metodológico obsoleto como lo es la encuesta.