Columnas
En la clase política, pero sobre todo con los protagonistas, se entiende perfectamente que este año es determinante para ir perfilándose en la carrera por las elecciones intermedias del 2027, en especial aquellos que tienen un cargo de primer nivel y que, a su vez, les permite asomarse más a los reflectores de la prensa. Eso, desde mi punto de vista, tiene meses que se viene trabajando en distintos terrenos; es decir, funcionarios del gabinete federal, diputados y senadores, llevan a cabo un trabajo paralelo a las funciones que tiene como encomienda. Podemos llamarlo como una labor compuesta de recorridos territoriales y presencia activa con la población civil que, al final de cuentas, tendrán en sus manos la determinación de decidir el destino a través de la encuesta que aplique el CEN de Morena.
Por eso es tan sustancial ser partícipe de la construcción del proceso de transformación que está encabezando la presidenta constitucional de México, Claudia Sheinbaum. Si bien la encuesta será el termómetro que mida la perspectiva ciudadana, la opinión de la jefa de Estado puede ser crucial para definir las 15 candidaturas de Morena en las elecciones intermedias. Aunque institucionalmente hay una pausa en la militancia, no podemos soslayar la relación inherente entre la mandataria y el partido en el poder. Siendo así, entendemos la importancia de los meses que transcurrieron, porque el consenso y la negociación, por el grado de participación, puede ser un mecanismo para tomar decisiones, de elegir a los coordinadores de la defensa del voto.
La mayor injerencia recaerá en la sociedad civil para tomar determinaciones que, a la postre, no traigan consecuencia, divisiones o costos políticos muy elevados que puedan poner en riesgo el triunfo que, así parece, está predeterminado a ganar Morena en la mayoría de entidades. Por tratarse de una elección estatal, el lopezobradorismo, más allá del momento inmejorable que vive como movimiento social, tiene que lanzar a sus mejores perfiles a una cancha que, desde ahora, está minada de hostilidad y guerra sucia. Aun siendo previsible eso, nada impedirá la abrumadora victoria contundente de la coalición Seguimos Haciendo Historia.
En Zacatecas, por ejemplo, Morena refrendará su triunfo en las urnas. Es verdad, en el proceso interno, además de una competencia de ataques frontales y descalificaciones, habrá intriga; lo mismo pasará en los demás puestos de elección que se jugarán a la par. El punto es que, para ello, Saúl Monreal, Senador de la República, está preparado para encarar el reto de buscar la gubernatura de su estado natal. Considerándolo como el relevo generacional que hizo énfasis Andrés Manuel López Obrador, el menor de los Monreal está escribiendo su propia historia. Hacerse de ese reconocimiento público no es tarea sencilla, sin embargo, Saúl, con hechos, demuestra capacidad y experiencia para ocuparse del cargo que le delegó el pueblo de Zacatecas.
Y sí, para él, como para muchos otros legisladores del Senado de la República, las condiciones están dadas. Más de una encuesta, que desde ahora mide el pulso ciudadano, lo colocan en la delantera de militantes y simpatizantes de Morena para abanderar la candidatura. La causa de ello, claro está, es la corriente de opinión positiva que se está generando a lo largo y ancho del territorio de Zacatecas. Por eso estos meses serán decisivos. Algo parecido a lo que aconteció en la sucesión presidencial que, meses atrás, arrancó con gran intensidad. Así se anticipa este escenario que, déjenme decirles, se vive con efervescencia en todas las trincheras, como son, desde luego, las asambleas, gestiones y reuniones con distintos sectores. Saúl Monreal, en ese sentido, ha puesto en marcha las Audiencias del Pueblo, que además de ser un mecanismo de participación ciudadana para acercar la función de los mecanismos legislativos, constituye una plataforma que comienza a nutrirse con el paso de los días.
Esto, para ser más precisos, se está operando al más alto nivel político. Saúl Monreal, por ejemplo, lleva meses trabajando en las localidades y municipios, rubros de gestión. Además de ello, acompaña en asuntos que, en ese universo de participación, brotan de los distintos sectores. Su reciente puesta en marcha de las Asambleas del Pueblo, que en realidad son órganos de información, son el mejor puente para dar seguimiento a los temas que aquejan a los ciudadanos. Entonces, tener una plataforma así, lo pone en la cima de los reflectores y, de paso, toma la delantera, eso sí, de una larga lista de hombres y mujeres que, llegado el momento, levantarán la mano. Eso, en principio, es un elemento inherente en cualquier proceso interno. Empero, esa decisión, como tal, le tocará al pueblo de Zacatecas a través de una encuesta que, de pies a cabeza, domina Saúl desde este preciso instante.
Cualquiera que haya dado seguimiento al ejercicio presidencial se dará cuenta de que, de principio a fin, Claudia Sheinbaum dominó el proceso interno. En lo político o, mejor dicho en el contexto social, Saúl Monreal vive un momento similar, pues, por mucho, ha recibido el respaldo anticipado de la sociedad. Se ha visto en las mismas encuestas de opinión en las que ha tomado la delantera. Y, por si eso fuese poco, Monreal, en el epicentro legislativo de la Cámara Alta, es partícipe de la construcción del segundo piso de la cuarta transformación. Es como el preludio de una gubernatura cantada que, como tal, pinta de la mejor forma para el menor de los Monreal.