Las autoridades del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Naucalpan han iniciado el procedimiento de expulsión contra los tres estudiantes implicados en la detonación de explosivos y armas de fuego dentro del plantel. Este incidente generó pánico entre la comunidad universitaria y provocó la suspensión de clases el pasado viernes 28 de febrero.
En el ámbito judicial, un juez del Poder Judicial del Estado de México, en los juzgados penales de Barrientos, vinculó a proceso a dos de los tres estudiantes detenidos, identificados como Mario, de 20 años, y Asher, de 18 años. Ambos permanecerán en prisión mientras se desarrolla el juicio en el que se determinará su responsabilidad en los delitos de disparo de arma de fuego y ataque peligroso.
El tercer estudiante, un adolescente de 17 años, fue liberado con las reservas de Ley, de acuerdo con la información proporcionada por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
De manera paralela, en el CCH Naucalpan se ha iniciado el proceso disciplinario conforme a la legislación universitaria para determinar las sanciones correspondientes a los presuntos responsables. Las fuentes oficiales señalaron que este procedimiento concluirá con la expulsión de los estudiantes, dado que dos de ellos han sido vinculados a proceso.
Se ha señalado que los tres jóvenes estaban presuntamente relacionados con la agrupación Federación de Estudiantes de Naucalpan (FEN), sin embargo, ellos han negado ante las autoridades de la UNAM y la Fiscalía mexiquense cualquier vínculo con este grupo.
En el CCH Naucalpan, donde estudian cerca de 10 mil alumnos de nivel bachillerato, se mantiene una manta con el mensaje: “Todas y todos unidos contra el porrismo, la violencia no cabe en nuestras instituciones educativas”, acompañada de los logotipos de la UNAM, el IPN y el Colegio de Bachilleres.