Una bala perdida pasa sobre 4 edificios y mata a Aideé

La bala que le quitó la vida a la joven Aideé Mendoza, estudiante del CCH Oriente, es calibre .9 mm y provino de un arma que fue detonada a una distancia mayor a los 130 metros. El proyectil hizo una parábola que pasó por encima de cuatro edificios y entró por la puerta del salón que estaba abierta.

Esta es la primera conclusión a la que llegaron peritos de la Procuraduría General de Justicia de la ciudad (PGJCDMX) que indagan el caso. Aún no saben si provino de la calle o de instalaciones de la Secretaría de Marina aledañas al plantel.

De hecho, los especialistas descubrieron que no era la primera ocasión en que alguien disparaba desde una distancia similar hacía las instalaciones del plantel educativo.

Y es que en los techos de los edificios aledaños al del salón de Aideé, los investigadores encontraron hasta ayer por la tarde, al menos 10 balas, la mayoría de ese mismo calibre. También encontraron un par de impactos de proyectil.

El martes fueron encontradas las primeras tres balas, y ayer las otras siete, y las dos marcas de impacto. ContraRéplica tuvo acceso a una serie de peritajes elaborados por la deinforme, se encuentra íntegro; es decir, no tocó nada desde que salió del arma, hasta que impactó en la joven de 18 años.

Primero —se detalla en el reporte— pasó por encima del “Edificio W” a unos 50 metros del lugar de la detonación; después por el “Edificio V”, luego por el “Edificio Siladín A”, a unos 100 metros; y finalmente por el “Edificio Siladín”.

A la mitad del “Edificio Siladín” comenzó su caída, y entonces entró al pendencia que encabeza Ernestina Godoy y que forman parte del expediente CI-FIZP/IZP6/UI-2C/D/2475/04-2019.

En ellos se concluye que la joven estaba sentada frente al pizarrón, pero dándole la espalda a la puerta, La bala que la lesionó, entró por esa puerta de aluminio con cristal, la cual estaba abierta la tarde del lunes. Dicho proyectil fue recuperado del interior del cuerpo de Aideé, y, según el salón donde estaba Aideé, el cual se encuentra en una orilla del “Edificio P”.

Los peritos hicieron una reconstrucción dentro del salón para saber cómo estaban colocados los alumnos y la víctima. Ahí, en el piso, hallaron dos manchas de sangre de la joven.

Según el reporte, Aideé se encontraba en línea paralela a la puerta, pero de espaldas. Frente a ella había una mesa, y del otro lado de esa mesa estaban Diana Laura y Oscar Uriel, dos compañeros que la veían de frente.

A pesar de que Diana Laura y Oscar Uriel estaban a menos de un metro de ella, ninguno vio nada extraño ese día. Sólo la vieron caer.

En la misma aula estaban otros compañeros identificados como Brenda Nahomi, Johan Daniel, Tamara Ximena, Fernando Misael, Jonathan Alexis, Itaandehui y César Emanuel. Ninguno se percató de la forma en que fue herida su compañera.

Sobre el lugar exacto de dónde provino la bala, las autoridades tienen dos hipótesis. Una que salió de instalaciones de la Secretaría de Marina que están a un costado del plantel educativo, y otra que fue de un predio aledaño.

La línea más fuerte indica que fue en el predio, y es que las armas cortas que tiene ahí la Marina son calibre .45. Las largas, explicaron autoridades, pocas veces son detonadas.