Tiembla el mundo ante el alza en precios de gasolinas y diesel

Aunque el precio del petróleo, que llegó a tocar niveles de 122 dólares por barril (WTI), y regresó a los 118 dólares, a la espera del alza de réditos por parte de la Fed, en los mercados financieros aumentaba también el temor por el grave efecto en los incrementos de precios de la gasolina.

Los precios de dicho combustible se elevan a nivel mundial debido a la demanda acumulada de viajes y los límites de refinación.

Lo anterior complica la vida de los consumidores, los banqueros centrales y los políticos. Es un impuesto al consumo que desvía el gasto de otras áreas y aumenta la inflación.

Los precios de la gasolina han superado el aumento del petróleo dada la escasez de capacidad de refinación y los controles de exportación de China.

Esta situación puede empeorar, con pronósticos de una temporada de huracanes en Estados Unidos por encima del promedio y la mitad de la capacidad de refinación de Estados Unidos en la costa del golfo.

Los ganadores, al menos por ahora, son las refinerías de petróleo como Marathon (MPC) o Valero (VLO).

El aumento de los precios de la gasolina es un lastre para el consumidor. Más del 5% del gasto promedio del consumidor de Estados Unidos, proporción que aumenta a más del 12% para la población de ingresos más bajos.

Una señal tan visible de aumento de los precios también está ayudando a impulsar las expectativas de inflación.

La gasolina puede tener solo un 4% de peso en la canasta de inflación de Estados Unidos, pero su precio subió 49% en el último informe de mayo.

Analistas financieros externaron su preocupación por el aumento a los precios de la gasolina en México, cuyo subsidio o condonación del IEPS en los primeros cuatro meses del año sumó más de 88 mil millones de pesos, de acuerdo con información del Servicio de Administración Tributaria.

Asimismo, las cifras revisadas de la balanza de pagos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) revelaron que de enero a abril los desembolsos por concepto de importación de gasolinas crecieron 78.1% a un nivel récord de 6,702 millones de dólares.

De acuerdo con el informe, durante el periodo enero-abril de este año, el consumo nacional aparente del combustible (producción, más importación, menos exportación) promedio los 753,129 barriles diarios, cifra 10.5% superior a la del mismo lapso del 2021, pero 5% inferior al pico del 2018 (792,390 barriles diarios).

En algunas ciudades del país, el precio de la gasolina premium oscila entre 25 y 26.50 pesos por litro; la magna se vende en un rango que va de los 23.50 hasta los 24.50 pesos por litro, y en otras regiones el precio por litro de diesel llegó hoy a los 28.60 pesos por litro, como fue el caso de 5 municipios en el estado de Sinaloa.

El gobierno ha estado respondiendo a este dolor de los consumidores, con 20 estados de Estados Unidos recortando los impuestos a los combustibles, lo que se suma a los aproximadamente 6,000 millones de dólares en subsidios globales a los combustibles fósiles.

Los precios de la gasolina son un gran problema político, impulsado por un alto uso en Estados Unidos y los altos impuestos europeos. Los automóviles estadounidenses tienen una eficiencia de combustible inferior a la media mundial (-20%), pero viajan el doble de distancia (14,000 km) promedio al año.

La eficiencia del Reino Unido y la Unión Europea es mejor (+15% sobre el promedio) y se viaja menos (menos de 7,000 km), pero los impuestos son altos.

El 50 % de los precios de los combustibles en el Reino Unido y el 60% de los de la Unión Europea son impuestos (tasa de combustible e IVA). Esto es el triple de Estados Unidos, donde el impuesto federal a la gasolina de 18.4 centavos de dólar por galón (c/g) no ha cambiado desde 1993.

Imagen: Cuartoscuro