A 90 días de haberse decretado en México la emergencia sanitaria por el Covid-19, lamentablemente la Ciudad de México se ha convertido en el epicentro de la pandemia.
Dos de sus 16 Alcaldías, Gustavo A. Madero e Iztapalapa, son las que encabezan la lista de las demarcaciones que tienen el mayor número de contagios, de fallecimientos y la mayor tasa de letalidad en la Ciudad de México.
A pesar de ello, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, decidió pasar el semáforo epidemiológico de rojo a naranja y permitir la reactivación de actividades laborales y económicas, entrando a la llamada “nueva normalidad”.
De acuerdo con cifras oficiales del Covid-19, la Ciudad de México tiene al 29 de junio, 47 mil 47 casos de contagios confirmados, lo que representa el 21.69 por ciento del total nacional y una tasa de letalidad del 11.22 por ciento. A nivel municipal, la alcaldía Gustavo A. Madero registra un total de 6 mil 38 casos confirmados, 976 fallecimientos y una tasa de letalidad de 16.16 por ciento. En Iztapalapa se reportan 8 mil 157 casos confirmados; mil 104 decesos y una tasa de letalidad de 13.53 por ciento.
Después, con una tasa superior al 12 por ciento de letalidad se ubican cinco alcaldías con tasa superior a 12 por ciento: Cuauhtémoc, con 12.871 por ciento; Azcapotzalco, con 12.86 por ciento; Álvaro Obregón, con 12.79 por ciento, Venustiano Carranza, con 12.74 por ciento e Iztacalco, con 12.34 por ciento.
Mientras que en el rango del 10 por ciento están Benito Juárez, con 10.8 por ciento, Coyoacán, con 9.2 por ciento y Miguel Hidalgo, con 9.15 por ciento. Como se ve, todas muy por encima del 5 por ciento de promedio mundial.
Estas cifras demuestran que, a pesar de la sana distancia, el confinamiento y las campañas informativas, el virus sigue siendo letal para las y los capitalinos y que el manejo de la emergencia sanitaria por parte de la jefa de Gobierno y de los alcaldes de Morena deja mucho que desear.
En Acción Nacional entendemos la difícil situación económica que obliga a miles de capitalinos a no poder quedarse en casa y salir en busca del sustento diario. Por ello, hemos propuesto una serie de medidas encaminadas a aliviar la profunda crisis económica que el Covid-19 ha agravado, pero transitar al semáforo naranja con tasas de letalidad tan altas y sin un manejo adecuado de la pandemia, es una decisión peligrosa que pone en riesgo la vida de miles de capitalinos.
Nosotros seguiremos invitando a la gente a cuidarse, a resistir y en la medida de lo posible a quedarse en casa, sólo así podremos reducir los contagios y las muertes en nuestra querida Ciudad de México.