facebook
El Hotel Chelsea

El Hotel Chelsea

Columnas viernes 12 de enero de 2024 -

Son pocos los lugares que existen alrededor del mundo que al contemplarlos, nos regalan unos minutos del pasado. En la calle 23, entre la 8° y la 9°, en la manzana que hace esquina con la 222 West, a la mitad de la cuadra, en Nueva York, está un viejo edificio de ladrillos rojos, en la entrada, varias placas con diferentes nombres conmemoran el lugar, junto a la puerta en letras de bronce se puede leer: Chelsea Hotel.

Una vez dentro, en la recepción, entre un montón de personas nada convencionales, bañados por una luz fluorescente, se solía encontrar a un hombre de unos setenta años con grandes gafas llamado Mister Bard. La oficina del señor Bard, está atestada de viejos muebles, (el edificio fue construido en 1884). En ese tiempo, el Chelsea fue concebido como el edificio de apartamentos más alto, y tuvo los primeros penthouses, duplex y roofgardens de toda Nueva York. Su valía radica en que, actualmente sus departamentos continuan originales, además de que como característica unica, ninguno de los 400 cuartos se parecen entre sí. De vuelta a la oficina de Mr Bard, y si pone uno un poco de atención en el viejo armario del fondo en donde se encuentran más de un centenar de libros, se da uno cuenta de que todas son primeras ediciones y tienen la particularidad de haber sido escritos todos en ese hotel.

El barrio de Chelsea roza con el bohemio Greenwich Village, donde después de la decadadel diez, se reunia la intelectualidad neoyorquina; uno de los primeros huéspedes inusuales fue Mark Twain, quien antes de ser famoso por Tom, fue respetado por afirmar lo siguiente: Para creer que eres valiente, primero debes ser valiente, eso es lo más esencial. Vladimir Nabokov terminó de darle los toques finales a su primera novela en inglés Bend Sinister, y preparó todo para Lolita. En ese viejo hotel, en la habitación 206, se hospedó y trabajó el poeta Dylan Thomas y muchos dicen que de ahí navegó hacia su muerte, no sin antes decir; I´ve had 18 straight whiskys and I think is a record. Dylan murió el 9 de Noviembre de 1953, dejando inconclusa su novela Adventures in the Skin Trade.

Arthur Miller escribió allí After the Fall e Incident Vichy, (cuando su cabeza lograba borrarse a ratos a Marilyn Monroe), escribía por días, lo mismo que Art Crane, Edgar Lee Masters o Wolfe. En otra de las suites del Chelsea, la diva del teatro Sara Bernhardt, dormía durante el día en un féretro que usaba por cama.

Otro Arthur, este vez de apellido C. Clarke, escribía en un cuarto el guion de 2001 Odisea del Espacio para Stanley Kubrick, mientras en la habitación de al lado Bob Dylan ponía en una hoja membretada del hotel frases de una nueva canción que decía With your mercurymouth in the missionary times, and your eyes like smoke and your prayers like rimes... con tu boca de mercurio en la era de los misioneros, y tus ojos como de humo y tus rezos que parecen rimas, y que servian los primeros versos de la bella Sad Eyed Lady of theLowloands de su album Blonde on Blonde.

En otra ocasión, en una de las ventanas del Chelsea vieron a Leonard Cohen entregarse a los placeres orales de Janis Joplin mientras su limousine la esperaba en la 23rd st para llevarla a uno de sus conciertos en el Fillmore. En retribución al esfuerzo, Leonard le compuso Chelsea Hotel.

En otro piso Jimi Hendrix tocaba con su equipo Marshall a todo lo que daba, mientras Andy Warhol filmaba una de sus películas:

-¡Puede usted cuidar a mi nena un minuto?

- ¡No!, contestó tajante el sujeto-, la última vez que me dijo eso tardó dos días en volver.

Este diálogo entre la modelo Viva y el poeta Gregory Corso cautivó a Andy Warhol, y eso fue lo que lo motivó para invitar a Viva a que hiciera el amor frente a su cámara en Blue Movie.

Viva pasó mucho tiempo en el hotel lejos de los excesos, ahora vive con su hija Gaby, a quien le dedicó su libro Gaby at the Chelsea.

La historia de Andy y el Chelsea es más amplia, él también hacía grandes bacanales con Nico, la cantante de algunos éxitos de Velvet Underground, y dos invitados que nunca faltaban: Candy Darling y Holly Woodlawn, los dos travestis que inmortalizara Lou Reed en Walk on The Wild Side. El testimonio de la fiesta quedó grabado en el álbum Chelsea Girls.

El musico Virgil Thompson, famoso autor de la ópera Cuatro Santos y Tres Actos, solía decir que no se cansaba de ofrecer sus respetos a todo aquel que estuviera en el ascensor del hotel porque nunca se sabía si esa persona era quien le servía de modelo para sus obras Desnudo Bajando la Escalera o You can´t go home again.

Madonna mostró algunos videos en su gira mundial Re-Invented Tour. Parte de ese material fue grabado en habitaciones del Chelsea, además de miles de fotos para su libro Sex.

En sus camas el Chelsea ha tenido que soportar el vigor de Frank Zappa, Pink Floyd, Keith Richards, Buddy Miles, Ronny Wood, Procol Harum, The Greatful Dead, The AllmanBrothers, The Beach Boys, Joni Mitchell quedó tan prendada de cierto amanecer en ese lugar, que escribió Chelsea Morning y William Clinton nombró, inspirado en esa tonadita Chelsea a su hija. Jefferson Airplane escribió The Third Week At The Chelsea cuando descubrieron que iban para un mes de fiesta dentro de ese lugar.

Un Inglés llamado Pete Hammill, poeta y lider de los Van Der Graaf Generator, resumió algunas de éstas décadas en el Chelsea: Radicales en los treinta, marineros ingleses en los cuarenta, los beats en los cincuenta, hippies en los sesenta y poseurs en los setenta, (y como ahora el internet ha llegado al Chelsea habría que agregar nerds en los ochenta)...

El Chelsea es un circuito de Karmas que nos regala momentos del pasado, como una verdadera puerta del tiempo. Es un lugar difícil de describir, pero algo es definitivo: el Chelsea es todo antes que un hotel.

Escucha mi podcast todos los días en www.patreon.com/elrenegado


No te pierdas la noticias más relevantes en twitter

Envíe un mensaje al numero 55 1140 9052 por WhatsApp con la palabra SUSCRIBIR para recibir las noticias más importantes.

/CR

Etiquetas


Notas Relacionadas
LÍNEA 13. Columnas
2024-12-11 - 01:00
“Comentócratas” y el Salario Mínimo Columnas
2024-12-11 - 01:00
¿Siria nos deja alguna lección? Columnas
2024-12-11 - 01:00
OTRA VEZ LA PRIMERA INFANCIA Columnas
2024-12-11 - 01:00
Puntapié al plan de vivienda de Sheinbaum Columnas
2024-12-11 - 01:00
Seguridad, la deuda del gobierno Columnas
2024-12-11 - 01:00
TIRADITOS Columnas
2024-12-10 - 07:01
LÍNEA 13. Columnas
2024-12-10 - 07:00
Regreso con Dignidad: un desafío inminente Columnas
2024-12-10 - 01:00
2024: Participación Ciudadana en cifras Columnas
2024-12-10 - 01:00
TODOS UNIDOS CONTRA CHINA Columnas
2024-12-10 - 01:00
Nvidia, en el fuego cruzado de EU vs China Columnas
2024-12-10 - 01:00
EL NUEVO ROSTRO DEL TURISMO EN MÉXICO Columnas
2024-12-10 - 01:00
+ -