Tal como lo comentamos en este espacio, la semana pasada fueron designados las y los consejeros electorales del INE y, este miércoles, el Senado de la República hizo lo propio con Rubén Lara Patrón, quien ahora es magistrado de la Sala Regional Especializada del Tribunal Electoral, cuyo nombramiento estaba pendiente desde hace casi tres años; sin embargo, el de la y los comisionados del INAI, duerme el sueño de los justos.
Resulta que el doce de marzo del año que transcurre, fue aprobado el acuerdo de la Junta de Coordinación Política de la cámara alta (JUCOPO), por el que se emitió la convocatoria pública y se estableció el procedimiento para la selección de dos comisionadas o comisionados del INAI, con motivo de la conclusión del periodo de María Patricia Kurczyn Villalobos y Joel Salas Suárez, quienes terminaron su encargo el pasado treinta y uno de marzo.
El registro se realizaría del diecinueve al veintisiete del mismo mes, pero con motivo de la pandemia del coronavirus, el pleno decidió suspenderlo hasta nuevo aviso y no se ve para cuando se reinicie.
En la convocatoria se previó que serían las comisiones de: Anticorrupción, Transparencia y Participación Ciudadana y de Justicia, quienes acordarían el formato y metodología para la evaluación, además harían el análisis de las candidaturas y presentarían a JUCOPO un dictamen fundado y motivado con el listado de las personas idóneas para ocupar los cargos y, al contrario del nombramiento de las y los consejeros del INE, en este proceso sí se previó expresamente que el listado no será vinculatorio en la decisión que tome el pleno, con lo cual se privilegia el consenso y el acuerdo político de los grupos parlamentarios.
Cabe señalar que en términos de la Ley Federal de Transparencia, los nombramientos pueden ser objetados por el presidente de la República en un plazo de diez días hábiles, pero si no lo hiciera, ocupará el cargo de comisionado, la persona nombrada por el Senado. En caso de objetarse, el órgano legislativo nombrará una nueva propuesta, pero deberá obtenerse una votación de al menos tres quintas partes de los miembros presentes, y si se objetara por segunda ocasión, designará de manera definitiva al comisionado que ocupará la vacante con el mismo requisito de votación.
Como puede verse, la ruta aun es larga, y sería deseable que se reiniciara a la brevedad el procedimiento para que el INAI esté debidamente integrado y continúe con sus trabajos de ser el responsable de garantizar en el ámbito federal, el ejercicio de los derechos de acceso a la información y la protección de datos personales.
Plancha de quite: “El Congreso es tan extraño. Un hombre se pone a hablar y no dice nada. Nadie le escucha…y después todo el mundo está en desacuerdo”. Boris Marshalov.