Columnas
Diputada Azucena Cisneros Coss
Vicecoordinadora del Grupo Parlamentario de Morena en la Legislatura del Estado de México
De acuerdo con el Diagnóstico en Materia de políticas culturales en Ecatepec 2016-2020, realizado por el antropólogo Ismael Mejía existen siete casas de cultura administradas por el gobierno municipal, dos casas de cultura del gobierno estatal, y un centro comunitario Casa de Morelos que es patrimonio histórico del país, a cargo del gobierno federal.
Pero en materia presupuestal hay una disparidad en el recurso que se destina, pues mientras en 2016, para la Casa de Morelos se destinó un millón de pesos para actividades culturales; en 2020, fueron solo 330 mil pesos por la pandemia; y a nivel municipal en 2016 se destinaron 12.6 millones de pesos, pero cuatro años después solo fue 1.1 millones de pesos.
Esta información fue presentada durante el foro de Arte y Cultura, ¿Para qué?, realizado en el Centro Cultural “Ricardo Flores Magón”, con la asistencia de activistas culturales, quienes pidieron respaldo de autoridades, presupuesto etiquetado y desarrollo de proyectos.
Y tienen razón sus exigencias, porque en Ecatepec durante décadas ha habido desprecio hacia la política cultural, cuando ésta es el arma más poderosa para recuperar las calles y mantener la seguridad, y no es con más policías, balas y patrullas.
Los activistas reclamaron el tener que trasladarse a la Ciudad de México para tener acceso a una película de culto, para ir al ballet, a una danza, o una exposición de pintura, porque en Ecatepec se carece de todo ello.
También que no se vea a la cultura solo como un tema de entretenimiento comercial, sino impulsar cultura comunitaria, con clases de escultura, poesía, dibujo y música, como resultado de un gobierno comprometido con ello, y dar oportunidades a los egresados de la escuela de las artes.
Garantizar cultura a las y los ecatepenses es un trabajo arduo para el gobierno, pero esa es justo la responsabilidad, el nuclear en la comunidad, hacer redes de apoyo y no dejar las calles a la delincuencia, porque los niños ya no pueden salir a jugar.
La cultura es un gran reto, y debe ser atendido de manera transversal, calle por calle, comunidad por comunidad, y generar espacios culturales recreativos, e incorporar a todos los sectores involucrados para hacer festivales barriales y en los pueblos, y también incorporar el arte urbano y los artistas callejeros con la participación de las y los jóvenes, como se hizo en Texcoco cuando gobernó la maestra Delfina Gómez.
La cultura y el arte son una herramienta poderosísima de intervención social, necesitamos garantizarlos en cada comunidad, y que también se ilumine cada rincón del municipio pero también que haya actividades culturales para todos los sectores.