En marzo de 2014 sorprendió el tiempo que estuvieron reunidos Barack Obama y el Papa Francisco, el viernes pasado el encuentro entre Biden y el Papa lo superó, el acercamiento entre Washington y el Vaticano ha retomado el rumbo después de la era Trump. Reportes de la Santa Sede y la Casa Blanca resaltan la disposición y la agenda común que ambos mandatarios abordaron.
El tema del aborto no fue objeto de la reunion, hablaron sobre el cambio climático, efectos de la pandemia, migración y las tensas relaciones con China.
Lo que llamó la atención fue la decision del departamento de Comunicación del Vaticano de cancelar unas horas antes la transmisión por televisión de los saludos iniciales y del intercambio de regalos que tiene lugar al final del encuentro. Después de la reunion privada, el Papa saludó a los miembros de la delegación visitante encabezados por Antony Blinken, secretario de Estado.
El trigésimo primer encuentro de un Papa y un presidente estadounidense, siendo el segundo con un mandatario católico después de la visita de John F. Kennedy en 1963. Eran tiempos más sencillos y sobrios, el mundo también estaba menos convulso, pero el inmenso dispositivo que se vio en El Vaticano y Roma, es sin duda proporcional al tamaño del temor por la seguridad del inquilino de la Casa Blanca, la inmensa caravana presidencial ha sumado 85 vehículos.
Cabe recordar que Biden visitó el Vaticano en dos ocasiones como vicepresidente, además, como jefe del Senado recibió al Papa en 2015 para el discurso ante las dos cámaras del Congreso de Estados Unidos en sesión conjunta y, sin duda, los dos católicos más influyentes en el mundo se conocen muy bien y han intercambiado mensajes en varias ocasiones.
Biden y el Papa llegaron a este reunion con problemas políticos a nivel interno donde sus opositores les complican su forma de gobernar y como buenos políticos siguen en su ruta.
El encuentro privado se ha prolongado durante una hora y cuarto, una duración extraordinaria muy superior a los 50 minutos con Barak Obama o los 30 con Donald Trump. En la misma línea, el encuentro posterior del presidente con el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin duró muchísimo más de lo previsto.
En esta visita Joe Biden fue acompañado de su esposa, Jill, quien igualmente se mostró emocionada de reunirse con el líder de la iglesia católica, con el representante de Dios en la tierra, mencionó.
Y como todo buen político, Biden llegó con un “as” bajo la manga para su reunion papal, la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) autorizó el viernes pasado el uso de emergencia de la vacuna contra Covid-19 de Pfizer para menores de 5 a 11 años.
@ncar7