Un lamentable incidente ocurrido en la alcaldía Miguel Hidalgo, Ciudad de México, ha conmocionado a la comunidad. El 20 de noviembre, una bebé de ocho meses de edad falleció mientras estaba bajo el cuidado del personal de la guardería Tiny Planet, ubicada en la colonia Ampliación Granada, mejor conocida como Nuevo Polanco.
De acuerdo con los reportes iniciales, la menor, identificada con las iniciales M. J. V. T., presentó complicaciones de salud mientras se encontraba en las instalaciones del centro preescolar, que atiende a niños desde los tres meses de edad hasta los cinco años. Aunque fue trasladada al Hospital Español, los médicos confirmaron que la pequeña llegó sin signos vitales.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ CDMX) abrió una carpeta de investigación por presunto homicidio culposo, mientras que las autoridades judiciales autorizaron un cateo en las instalaciones de la guardería el 21 de noviembre. Durante la inspección, realizada el 22 de noviembre, se revisaron bitácoras, documentos y videos de vigilancia, tras lo cual el inmueble fue clausurado.
Tiny Planet, que se promociona como una institución de alto nivel y cuenta con otras sucursales en Santa Mónica y Zona Esmeralda, así como en Weston, Florida, está en el centro de la polémica. Este suceso ha desatado el descontento y la preocupación entre los padres de familia, quienes ahora exigen mayor regulación y supervisión de este tipo de centros educativos.
Entre las líneas de investigación se analiza si la bebé tenía alguna condición médica previa o si hubo negligencia por parte del personal encargado. Las declaraciones de los trabajadores presentes el día del incidente serán clave para esclarecer lo ocurrido.
Este caso ha reavivado el debate sobre la seguridad y calidad de las guarderías privadas en zonas exclusivas de la Ciudad de México. Especialistas y ciudadanos han señalado la urgencia de establecer controles más estrictos y garantizar que el personal esté debidamente capacitado para evitar tragedias similares en el futuro.
Mientras tanto, la familia de M. J. V. T. enfrenta un profundo dolor ante la pérdida y la incertidumbre sobre las circunstancias exactas de su fallecimiento. La Fiscalía continuará con las investigaciones, y se espera que en los próximos días se den a conocer avances que permitan entender lo sucedido y, eventualmente, se haga justicia.
Foto por la Fiscalía