AFP
Los bombardeos de Estados Unidos contra instalaciones nucleares en Irán causaron heridos, indicó el Ministerio iraní de Salud, pero ninguno presentaba signos de "contaminación radioactiva".
"Ninguno de los heridos trasladados hacia (centros médicos) tras los ataques estadounidenses presentaba signos de contaminación radioactiva", afirmó en X el portavoz del ministerio, Hossein Kermanpour, sin precisar el número de personas hospitalizadas.
La declaración se dio en el contexto de las crecientes tensiones entre Teherán y Washington, luego de que fuerzas estadounidenses llevaran a cabo ataques dirigidos contra tres instalaciones nucleares en territorio iraní. Aunque el gobierno de Estados Unidos ha señalado que las acciones fueron parte de una respuesta estratégica a amenazas percibidas, la comunidad internacional ha expresado preocupación por el riesgo de una escalada regional y por las implicaciones que estos bombardeos puedan tener en materia de seguridad nuclear.
Por su parte, autoridades sanitarias iraníes activaron protocolos de emergencia para atender a las personas afectadas en las inmediaciones de las instalaciones atacadas. Diversos centros médicos del país fueron habilitados para recibir posibles casos de exposición a materiales radiactivos, en atención a los riesgos asociados a cualquier operación militar cerca de instalaciones nucleares. No obstante, tras las primeras evaluaciones clínicas, se descartó la presencia de contaminación radioactiva en los pacientes.
El Ministerio de Salud de Irán no brindó detalles sobre el tipo de lesiones sufridas por los heridos ni sobre la gravedad de su estado de salud, aunque se informó que continúan bajo observación médica. La falta de cifras concretas también ha generado especulaciones sobre el alcance real de los daños humanos y materiales provocados por los ataques.
Organismos internacionales, incluidos algunos vinculados a la Organización de las Naciones Unidas, han reiterado el llamado a la moderación y al respeto del derecho internacional humanitario, subrayando que cualquier acción militar cerca de infraestructura nuclear representa un peligro inminente para la población civil y el medio ambiente. En este contexto, se espera que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) emita una evaluación sobre la situación de las instalaciones atacadas en los próximos días.
Mientras tanto, el gobierno iraní continúa evaluando las repercusiones del ataque y ha advertido que responderá de forma proporcional si se repiten acciones similares.