Columnas
Fueron 90 minutos, el martes por la noche, los que sirvieron para confirmar lo que dicen los demócratas: Kamala Harris va conquistando la simpatía de votantes, sobre todo, de los indecisos y esperan se muestre el próximo 5 de noviembre en las urnas.
Los demócratas y Harris se mostraron como estrategas puros, hicieron lo necesario para exhibir el lado iracundo, irritable y caprichoso de Donald Trump.
Temas como el aborto, la migración y la invasión de Ucrania, desestabilizaron al controvertido candidato republicano, vimos a un candidato acorralado buscando salir con base a mentiras, interrupciones e incluso gritos.
Empresas televisas, periódicos y universidades realizaron un ejercicio, la mayoría de los votantes participaron en un grupo de discusión –focus group– de la CNN en la Universidad Mercyhurst de Erie, Pensilvania, quienes dijeron que Harris había ganado.
El grupo estaba formado por 13 votantes que aún no habían tomado una decisión sobre a quién votar antes del debate. Cuando Phil Mattingly, de CNN, preguntó al grupo quién había ganado el debate, ocho de los participantes dijeron que Harris había ganado el enfrentamiento. Mattingly señaló que Erie es “el condado más indeciso en el campo de batalla”, informa CNN.
The Washington Post ha realizado un ejercicio semejante con un grupo de personas de Estados indecisos a los que hizo preguntas durante el debate, y concluyeron que Harris tuvo un mejor desempeño, independientemente de cómo planean votar en noviembre. Así, Harris parece haber consolidado el apoyo de los votantes que se inclinaban por ella.
Este cara a cara, que muy seguramente será el único entre los aspirantes presidenciales, había generado gran expectativa, ya que, había muchas dudas por resolver, ¿Trump habría aprendido a controlar su carácter?, ¿Kamala está preparada para gobernar?, Trump ¿ha dejado la confronta como método político? Kamala ¿sostendría las acusaciones contra su contrincante?
En términos generales, ambos fallaron al no responder ciertas preguntas y compartir datos falsos o tendenciosos. En algunas ocasiones, los candidatos fueron desmentidos por los moderadores, no obstante, la vicepresidenta demócrata optó por una estrategia ofensiva, ya que, intentó provocar las respuestas del expresidente con recordatorios sobre las elecciones presidenciales de 2020, ciertas afirmaciones falsas y sus problemas legales. Esto llevó al republicano a realizar ataques personales e incluso responder con gritos.
Las encuestas posteriores al debate tardarán algunas horas en salir, pero algunos análisis especializados indican que la candidata demócrata Kamala Harris se llevó el debate, aunque no por mucha diferencia. De acuerdo con The Boston Globe, Harris ha obtenido una calificación de “C”, mientras que Trump ha obtenido “C menos”. De acuerdo con la revista Newsweek, la mayoría ha señalado que Harris ganó el debate.
Ahora es mantener esa ola triunfante y llegar a noviembre para capitalizarlo en noviembre.
@arnc7