Columnas
La inseguridad pública en México es un tema de preocupación constante que afecta a la vida cotidiana de los ciudadanos y socava la confianza en las instituciones encargadas de garantizar la seguridad. Si bien la violencia ha mostrado algunas fluctuaciones en los últimos años, con periodos de incremento seguidos de descensos, los niveles siguen siendo alarmantes. Esto se refleja en indicadores como la tasa de incidencia delictiva, que, si bien ha tenido una ligera disminución en los últimos años, sigue siendo considerablemente alta en comparación con estándares aceptables.Uno de los aspectos más preocupantes es el incremento en el número de homicidios dolosos y feminicidios. Aunque se ha observado una tendencia decreciente en los últimos años, con algunos retrocesos en 2023, los niveles siguen siendo elevados. Entidades como Colima, Baja California, Guerrero y Chihuahua han sido especialmente afectadas por esta problemática, lo que pone de manifiesto la necesidad de implementar políticas públicas más efectivas y de fortalecer las instituciones encargadas de la seguridad y la justicia.Factores como el desempleo, la pobreza, la corrupción, la falta de castigo a los delincuentes y el narcotráfico, inciden de manera directa o indirecta en la inseguridad pública, generando un círculo vicioso que afecta la calidad de vida de los ciudadanos. Dentro de las principales causas de la inseguridad en México, se incluyen la falta de oportunidades económicas y sociales, la impunidad, los impactos del mercado de las drogas y la debilidad institucional en las autoridades de seguridad e impartición de justicia.Además de los aspectos cuantitativos, es importante considerar el impacto que la inseguridad tiene en la vida diaria de las personas. La sensación de temor e inseguridad limita la libertad de movimiento de los ciudadanos, afecta su calidad de vida y obstaculiza el desarrollo económico y social de las comunidades. La falta de oportunidades, la desigualdad y la impunidad son factores que contribuyen a perpetuar este ciclo de violencia, por lo que es necesario abordar estos problemas de manera integral y coordinada.Sin duda, este es un problema multifacético que requiere de un enfoque integral y coordinado para su solución. Por este motivo, las tres personas que aspiran a presidir la administración pública federal —Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez— deberán de trabajar en un proyecto estratégico que deberán de implementar, de llegar a la Presidencia de la República, pero que la sociedad debe conocer ahora, antes de decidir su voto.En este sentido, es necesario subrayar políticas públicas efectivas que aborden las causas subyacentes de la inseguridad y fortalecer las instituciones encargadas de garantizar la seguridad y la justicia. Solo así se podrá garantizar un entorno seguro y pacífico para todos los mexicanos.Es fundamental fortalecer las instituciones encargadas de la seguridad y la justicia con una perspectiva de respeto a las garantías individuales, mejorar las condiciones socioeconómicas de la población y promover una cultura de legalidad y respeto a los derechos humanos. Solo a través de un enfoque integral y coordinado se podrá hacer frente a la inseguridad y garantizar un entorno seguro y pacífico para todas las personas en el país.*Periodista | @JoseVictor_RdzPremio Nacional de Derechos Humanos 2017