Trabajadores del Poder Judicial se plantan en defensa de su autonomía ante amenazas de reforma

Por segundo día consecutivo, los trabajadores del Poder Judicial desafiaron las advertencias de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) que amenazaba con recortes salariales e incluso la destitución de sus funciones. Bajo la consigna "¡Ni un paso atrás!", los miembros del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) mantuvieron su suspensión indefinida de actividades y realizaron una serie de manifestaciones en defensa de su autonomía.

Amparados en su derecho a la libre asociación, garantizado por el Artículo 9 de la Constitución, los manifestantes marcharon pacíficamente hacia la Cámara de Diputados, donde entregaron su pliego petitorio a la Junta de Coordinación Política (Jucopo). Más tarde, formaron una valla humana alrededor de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) como un acto simbólico para protegerla de la reforma judicial que impulsa el gobierno federal.

Laura Magaña, vocera de los trabajadores del CJF, hizo un llamado a sus compañeros a no dejarse intimidar por las amenazas. "No debemos caer en contienda, porque en los Estados Unidos Mexicanos somos libres y la clase trabajadora está protegida para defender sus derechos laborales", declaró Magaña, quien enfatizó la importancia de mantener la independencia de los tres Poderes de la Unión.

A las dos de la tarde, miembros del Movimiento Circuitos Unidos se presentaron en la Cámara de Diputados para solicitar una audiencia con los coordinadores parlamentarios de todos los partidos. Óscar Alonso Yáñez Pallares, en representación del movimiento, leyó un comunicado en el que se apelaba al derecho de audiencia consagrado en el Artículo 14 de la Constitución, solicitando un diálogo para expresar su postura ante la Reforma Judicial que consideran perjudicial para sus derechos laborales.

Posteriormente, a las tres y media, los trabajadores de la SCJN se unieron a una manifestación pacífica alrededor de la sede del máximo tribunal del país, destacando la necesidad de proteger el sistema judicial tal como existe hoy. Patricia Aguayo, vocera del movimiento de juzgadores, expresó su apoyo a los trabajadores de la Suprema Corte, quienes, según ella, "por fin se armaron de valor" para salir a manifestarse.

La manifestación no estuvo exenta de confrontaciones verbales. Simpatizantes de Morena increparon a los trabajadores judiciales con gritos de "¡Rateros!" y "¡Huevones!", llevando la discusión a un tono más elevado. No obstante, la protesta se mantuvo pacífica, sin que se registraran actos de violencia física.

Con pancartas que descalificaban a los ministros de la Suprema Corte y los señalaban como un "grupo delictivo", los simpatizantes de Morena continuaron su confrontación verbal. A pesar de esto, los trabajadores de la Corte no se amedrentaron y elevaron sus voces en defensa del sistema judicial. La manifestación concluyó a las cuatro de la tarde, cuando los manifestantes reingresaron al edificio de manera ordenada y pacífica, entre consignas y aplausos.