Mexicanos consumen azúcares por encima de recomendaciones de la OMS

El consumo excesivo de azúcar representa un problema para la salud de los mexicanos y los azúcares añadidos a productos ultraprocesados contribuyen a la densidad energética de las dietas, lo que a su vez trae como consecuencia obesidad y sobrepeso.

Así lo dio a conocer a través de un comunicado el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), el cual señaló que de acuerdo con estudios consultados, el 19 por ciento de la mortalidad por diabetes, enfermedades cardiovasculares y algunos cánceres, está relacionada con la sobreingesta de azúcar.

Explicó que según un estudio revisado por LabDO, la población mexicana en general consume 365 kilocalorías (kcal) al día de azúcares, de los cuales 238 kcal son azúcares libres o agregados, representando un 12.5 por ciento de la energía total consumida.

Ello coloca a la dieta del mexicano por encima de las recomendaciones emitidas por la OMS, organización que ha determinado que máximo el 10 por ciento de la energía de la dieta provenga de este nutriente, aunque lo ideal sería que fuera el 5 por ciento, equivalente a 25 gramos de azúcar.

Estos azúcares no solo están presentes en los refrescos, sino en todas las bebidas endulzadas, sean estas lácteas o jugos saborizados, y en otros productos como salsas, galletas, panes y postres en general. Una cucharada de salsa catsup, por ejemplo, contiene alrededor de 4 gramos de azúcares.

Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que los azúcares libres representan el 43 pr ciento de la energía alimentaria total presente en los productos ultraprocesados analizados en su estudio “Alimentos y bebidas ultraprocesados en América Latina”.

En el caso de México, las bebidas gaseosas aportan el 21.7 por ciento de la energía alimentaria proveniente de los productos mencionados; los jugos y bebidas endulzadas el 8.4 por ciento; salsas y aderezos, el 7.6 por ciento y yogures endulzados el 2.4 por ciento.

Los cereales listos para consumir, pastelillos y dulces contribuyen a la ingesta excesiva de azúcar. El café y el té representan 12.7 por ciento del consumo de azúcar en adultos, y las aguas frescas y bebidas endulzadas en casa, el 10.5 por ciento.

De acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018, el 85.8 por ciento de los adultos de 20 años y más consumen bebidas no lácteas endulzadas cotidianamente.

Los niños de 5 a 11 años presentan también altos consumos de estos productos. El 52.9 por ciento de ellos consumen regularmente cereales dulces, y el 38.2 por ciento bebidas lácteas endulzadas, siendo los grupos de edad con mayor ingesta de los mismos.

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