Estos días comenzó a formarse un tsunami político cuyas aguas de cambios han tocado varias naciones : Argentina, Chile, Brasil, pero en Bolivia ahí arrasó y con él se llevó a Evo Morales, el presidente que pensó sería fácil perpetuarse en el poder. Estas elecciones desde que él anunció que aspiraba a un cuarto mandato se comenzaron a manchar de fraude, por lo que ahora su propio pueblo salió a las calles; eso aunado al reporte de la OEA que denunció “contundentes irregularidades”. Evo no tuvo otra salida más que presentar su renuncia.
Esta situación puso a trabajar la nueva alianza de izquierda en Latinoamérica. Bien lo dijo Nicolás Maduro tras el triunfo de Alberto Fernández: llegó el eje progresista con México y Argentina, y tener aliados políticos por supuesto le conviene al dictador venezolano para continuar en el Palacio de Miraflores. Tanto el presidente electo de Argentina como López Obrador operaron para la salida del país del líder indígena que aún fuera de Bolivia seguirá manejando hilos de poder. La pregunta es ¿Qué gana México al darle asilo a Evo?
Las últimas horas han sido de convulsión e incertidumbre en la nación sudamericana: una cosa ha sido la renuncia de Evo, pero otra los saqueos y destrozos en su propia casa y la de su hermana así como amenazas a personas de su entorno. Eso es muy distante de hablar de una madurez política como nación , ya que estos hechos han sido utilizados por gobiernos de izquierda para hablar de un golpe de Estado, lo que no convence.
Las Fuerzas Armadas y la policía sugirieron al presidente presentar su renuncia, y hasta el momento no han mostrado interés en asumir ningún tipo de poder, es por eso que es cuestionable hablar de un “golpe de Estado” cuando lo que sí se vive es un vacío de poder.
La tormenta “Evo” está en su apogeo, y el tener mayoría en el Congreso le da todavía control sobre el futuro político de su país; el pueblo logró lo que en años no se ha podido en Caracas: sacar a un dictador. Son los tiempos de la democracia, pero lo que pasó en Bolivia si retumbará en naciones como Nicaragua, Cuba y la propia Venezuela.
Turbulencia.- Mañana en Washington inician las primeras audiencias públicas de testigos clave en la investigación para destituir al presidente Donald Trump. El encargado de los negocios estadounidense en Ucrania, Bill Taylor, será el primero en sentarse frente al Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, no será un día de campo para el presidente de Estados Unidos.
•Es analista de temas internacionales, especialmente, en política de EU, Latinoamérica y el Vaticano.
@lauperezcisnero