Para muchas personas octubre es el mes en el que comienzan a pintarse los árboles de colores otoñales, el fin del verano y el comienzo de la cuenta regresiva para las fiestas decembrinas. Para mí, este mes es el Mes de la Concienciación sobre el Cáncer de Mama; un periodo en el que debemos recordar la importancia de las revisiones rutinarias y la detección oportuna que realmente salva vidas.
El 19 de octubre es el Día Internacional de lucha contra el Cáncer de Mama. Uno de los objetivos del Mes de la Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, mejor conocido como octubre rosa, es educar a las mujeres sobre la importancia de la salud de las mamas y de las revisiones.
De acuerdo con la Sociedad Americana del Cáncer, algunos de los factores más importantes a la hora de predecir el diagnóstico son el tamaño y la extensión del cáncer de mama, lo que hace que la detección a tiempo sea especialmente importante.
Con pruebas y exámenes, algunas enfermedades pueden detectarse antes de que se manifiesten los síntomas y el tratamiento puede comenzar antes de que la vida de las pacientes se encuentre en riesgo. Muchas de nosotras nos hemos visto afectadas por el cáncer de mama, ya sea por nuestro propio diagnóstico, por miembros de la familia o incluso por colegas.
Especialistas refieren que desafortunadamente en México 72% de las mujeres con cáncer de mama son diagnosticadas cuando están en la etapa 3 o 4 de la enfermedad, lo ideal es realizar el diagnóstico en la etapa 1 para tener hasta 90% de posibilidades de curación. Soy fiel creyente de que el cáncer de mama es curable si es detectado y tratado a tiempo, por ese motivo, el año pasado en el PVEM pedimos que los servicios de salud dupliquen sus esfuerzos, al realizar más mastografías y campañas de concientización aumentan las posibilidades de detección temprana.
En nuestro país, desde hace más de 15 años el padecimiento por cáncer de mama constituye la primera causa de muerte en la población femenina y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) señaló que en América Latina, es la segunda causa de muerte. A pesar de que el panorama se vislumbra poco alentador, hay noticias positivas: las estadísticas están cambiando y la curva de diagnósticos de cáncer de mama mortal está descendiendo debido a la detección temprana y a la mejora en los tratamientos.
Te comparto algunas recomendaciones esenciales de National Geographic para la prevención del cáncer de mama:
● Autoexámenes de mama a partir de los 20 años
● Exámenes clínicos de las mamas a los 20 y 30 años, al menos cada tres años
● Mamografías anuales a partir de los 40 años
¿Cuándo acudir a consulta médica?
● Cambios en el tamaño o la forma del pecho
● Dolor o picor en el pezón
● Líquido que sale del pezón sin apretarlo
● Hinchazón, enrojecimiento, calor u oscurecimiento de la mama
● Bulto, nudo duro o engrosamiento en la mama o en la zona de la axila
● Un cambio en la textura de la piel, como un fruncido o un hoyuelo
● El pezón se hunde o cambia de posición o forma
También podemos hacer ajustes en nuestra vida diaria para reducir el riesgo de padecer esta enfermedad: mantener un peso saludable, realizar algún tipo de actividad física, limitar la cantidad de alcohol que ingerimos, disminuir el uso de hormonas para los síntomas de la menopausia, evitar fumar.
Recordemos que el cáncer no discrimina, más vale prevenir y detectar a tiempo para elevar el porcentaje de éxito en el tratamiento.