Columnas
El vocero del Comité Directivo Estatal del PAN, Agustín Basilio de la Vega, anunció que el 70 por ciento de los candidatos a las 212 presidencias municipales de Veracruz son ciudadanos. Única alternativa para ocultar su falta de militantes en el estado, quiere aparentar que su partido se abrió a la población para darle espacios de decisión política.
La realidad es que todavía a finales de febrero les faltaban 100 voluntarios para que ocuparan las vacantes de candidaturas.
El PAN quiere disfrazar la carencia de militantes en todo el país, como una nueva política de apertura a la sociedad, cuando, en realidad ha sido el partido más cerrado de la historia del país, con más requisitos que cualquiera para integrarse como militantes. Sus aspirantes debieron esperar años para poder tener la esperanza de su militante del conservadurismo mexicano.
Los filtros para ingresar a sus filas eran interminable y ponían a prueba hasta la persistencia de los aspirantes. Ahora, ante la necesidad de incorporar a todo el que pueda salvarlos de perder el registro a nivel nacional, por falta de militantes, cualquier puede ser candidato del PAN a las presidencias municipales de Veracruz.
El habitual desprecio de los panistas por el resto de la población ahora se les revierte porque no fue fácil que esos candidatos improvisados y sin experiencia política se incorporarán a una tarea que realizarán más por aburrimiento que por convicción.
Entre estas personas, habrá quienes piensan de manera totalmente opuesta a las consignas tradicionales panistas pero compiten con sus colores y algunos de ellos, intentarán triunfar en las urnas.
El vocero del PAN estatal informó que 144 candidaturas de igual número de alcaldía serán ocupadas por ciudadanos no militantes. Personas que no conocen los estatutos ni las políticas de ese organismo y pueden causar no sólo sorpresas sino problemas si es que llegaran a ganar. Esto dependerá del arraigo en sus comunidades y la suerte, porque según intención del voto en las próximas elecciones del 1 de junio, Morena y sus aliados tiene pronosticado el triunfo en 200 presidencias municipales.
Si estas personas desconocen las mínimas reglas electorales, de qué manera podrán competir y, lo que es peor no saben los límites de las campañas ni las atribuciones de un presidente o presidenta municipal de tal manera que sus discursos podría llegar a convertirse en piezas de comicidad involuntaria.
Hay una vocación, de reciente adquisición hacia el histrionismo de algunos panistas, sobre todo su líder nacional y algunas legisladoras que confunden la tribuna con los lamentos propios de un teatro clásico griego. Quien haya visto la puesta en escena de Eurípides, Las Troyanas, verá una similitud automática con algunas intervenciones de panistas en tribuna.
Su clasismo y discriminación hicieron mucho daño a los mexicanos y a sí mismos.